Nuestros libros sensoriales están diseñados especialmente para cada uno de los peques. Pero… Su objetivo, no es solo fomentar el aprendizaje a través del juego y ayudar a los peques a desarrollar todas sus potencialidades.

También nos permite reforzar los lazos emocionales con nuestros peques. Un aspecto que tan importante es y que os proporcionará muchos ratos de diversión, alegría al lado de vuestros hijos e hijas,y de satisfacción al ver como crecen y aprenden un montón de cosas.

De esta manera, son ellos los que, mediante el juego manipulativo que les proporcionan las actividades, aprenden a descubrir y generar nuevos conocimientos.

Os dejamos unos consejos para que aprovechéis estos fantásticos ratos, que no tienen precio, con los reyes y reinas de vuestra casa.

  1. Dedicad un ratito al día para jugar con ellos y su quiet book. Buscad un rato tranquilo que tengáis durante el día, así el juego estará libre de prisas y nervios.
  2. Preparad un espacio en casa adecuado para que os sentéis con ellos y os dispongáis a zambulliros en sus páginas y jugar con sus accesorios.
  3. Si ponéis una música suave, ambiental, de género clásico el ambiente se convierte en ideal. Os recordamos el llamado efecto Mozart, que según estudios realizados desde hace años, escuchar música de este compositor durante un rato estimula las capacidades neurológicas y potencia el aspecto cognitivo de las personas (sobre todo en los niños pequeños) haciendo que sean más rápidos de pensamiento y despierten su inteligencia.
  4. Y, finalmente, a jugar. Animadles, estimularles, habladles, preguntadles, etc.  En resumen, acompañadles, hacedles de guía, ayudadles si os piden ayuda, y observadles como aprenden y os sorprenden con su capacidad para hacerlo.

Recordad que nuestra función como adultos no es explicarles cómo hacer las actividades, sino que nuestro papel es hacer de guías, motivándolos a jugar con él, a manipular sus piezas libremente, a intentar, a probar, a experimentar, a resolver… En definitiva, a APRENDER Y A DISFRUTAR HACIÉNDOLO.